Revista Nº34 "TEORÍA POLÍTICA E HISTORIA"

 

 

Las nociones de Kairós relacionadas con el caso de E. Macron

durante las elecciones presidenciales francesas (2016-2017)

 

Dr P. Cailleba, Profesor  ESC Pau Business School

Dr F. Dosquet, Profesor ESC Pau Business School

 

Biografía de Patrice Cailleba:

P. Cailleba es profesor de Management en la ESC Pau Business School. Tiene un doctorado de Filosofía política (Sorbonne-Paris IV, 2004) y un Master en Management (ESCP Europe, 1998). Su tesis sobre “El individuo en la filosofía de Marx” fue publicada en 2005 (ANRT, Paris: 2005). Publicó varios artículos y capítulos para revistas y congresos sobre la política, los ideos políticas pero también sobre la RSE et la ética empresariales.

 

Publicaciones principales de 2017

Cailleba P. (2017), “La aventura editorial del Capital de Karl Marx", Revista Argentina de Ciencia Politica, n°31 ‘Teoria Politica e Historia, Agosto 2017

Cailleba P. (2017), “ Les stratégies révolutionnaires du prolétariat chez Karl Marx", Revue d’histoire de la pensée économique, 2017-1, n°3, p.101-130

Cailleba P. (2017), “René Girard à l’aune du djihadisme", Revue des Deux Mondes, février/mars, p.153-160

Cailleba P. & Edelbloude J. (2017), “Chapitre 1: De l’idée à l’idéologie politique”, Marketing et communication politique, Frédéric Dosquet (Editor), 2ème édition, Edition EMS, p.11- 86.

 

Filiacion institucional:

Laboratoire IRMAPE,

ESC Pau Business School

Correo postal:

Groupe ESC Pau

Campus Universitaire

3, rue Saint-John Perse

BP 7512

64075 Pau Cedex

FRANCIA

Correo electrónico:

patricecailleba@yahoo.fr

Telefono:

 +335 5992 6468

 

Biografía de Frédéric Dosquet:

Frédéric Dosquet es profesor de Marketing en la ESC Pau Business School. Tiene un doctorado de Gestion (Universidad de Pau, 2010) y un Master en Management (ESCP Europe, 1992) y dos otros Masters en política (Panthéon Assas, 1990) y estrategia (Panthéon Assas, 1991). Publicó quince libros y varios artículos para revistas y congresos sobre la comunicación política (Marketing politique) y el Marketing en general. Trabaja ahora sobre el camino de Santiago de Compostela.  

 

Publicaciones principales de 2017

Dosquet F. (Editor) (2017), Marketing et communication politique, Paris : Edition EMS.

Dosquet, F. Bonnardel, V. Seraphin, H. (2017), « La marque politique. Le cas de l’évaluation du logo ‘Les Républicains’ par ses militants », Revue Française du Marketing, N°162, 4/4, p.25-36. FNEGE 4

Dosquet, F. et Ali. (2017), « Chapitre 2 : La nouvelle gouvernance des Chemins de St Jacques de Compostelle peut-elle construire à terme un contrat de destination touristique ? » in BEDE, S. et SPINDLER, J., Les contrats de destinations. Paris: l’Harmattan.

Dosquet, F et al. (2017), L’innovation agile. Paris: ENI.

 

Filiacion institucional:

Laboratoire IRMAPE,

ESC Pau Business School

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Las nociones de Kairós relacionadas con el caso de E. Macron

durante las elecciones presidenciales francesas (2016-2017)[1]

 

Dr P. Cailleba, Profesor  ESC Pau Business School

Dr F. Dosquet, Profesor ESC Pau Business School

 

Resumen (no más de 120 palabras)

En este artículo, estudiamos el concepto griego de kairós (momento oportuno) para aplicarlo a la campaña presidencial de E. Macron (2016-2017) elegido en Francia el año pasado. Consideramos las raíces históricas y las evoluciones epistemológicas del concepto usado por Homero, Aristóteles y Platón. A continuación, mostramos cómo el futuro presidente francés aprovechó la secuencia de acontecimientos para acceder a la magistratura suprema. Finalmente, repasamos las derivas del kairós consideradas y ya condenadas desde la antigua Grecia a través del concepto de hibris y después con el nuevo uso cristiano.

Palabras claves:

kairós, hibris, Macron, elecciones presidenciales 

 

 

Abstract

In this article, we look at the Greek concept of kairós (right time) to analyze E. Macron's presidential campaign (2016-2017) which occurred in France last year. We consider the historical roots and epistemological evolutions of the concept used by Homer, Aristotle and Plato. Then, we show how the future French president took advantage of the sequence of events to gain access to the supreme power. Finally, we review the aberrations of the kairós considered and condemned since ancient Greece through the concept of hibris and after with its Christian use.

 

Key words:

kairós, hibris, Macron, presidential election  

 

 

En el prefacio de la Crítica de la Economía Política, Marx escribe que las nuevas y superiores relaciones de producción nunca son sustituidas sin que las condiciones materiales de existencia de estas relaciones se hayan manifestado en el seno mismo de la vieja sociedad (Marx, 1977: 260 sq.). En otras palabras, una nueva sociedad no nace de la antigua: se construye sobre las ruinas de la antigua. Primero debemos ver los vestigios de una sociedad erosionarse y desmoronarse antes de que podamos al fin construir la secuela. Esto es lo que ocurrió durante las elecciones presidenciales francesas de 2017.

 

Llamado el presidente jupiterino[2] desde que ganó estas elecciones, Emmanuel Macron parece disfrutar de una situación temporal extraordinaria que le da la imagen de un hombre providencial favorecido por una forma de presidencialismo francés (Cheibub, 2006). Después de un mandato político considerado poco convincente[3] de su predecesor F. Hollande (2012-2017), el Presidente Macron dejó claro, desde su primer discurso en el patio del Palacio del Louvre, que quería inaugurar una presidencia histórica de nuevo impulso a partir de las fuerzas vivas de Francia. En su ensayo, Girardet (1986) destaca la eficacia de esta figura social que representa "el salvador" a través de tiempos políticos oscuros y aparentemente sin esperanza. E. Macron supo utilizar esta imagen apareciendo como un estimulador de energía de un poder excepcional.

 

Para ganar estas elecciones, E. Macron tuvo que convencer a la mayoría de los franceses de que la oferta política tradicional estaba desfasada y de que un hombre de 39 años, sin mucha experiencia política, al frente de su propio partido creado para la ocasión, podía presidir el destino de su país. Sin embargo, Macron no tuvo que luchar demasiado contra sus oponentes políticos. Tan pronto como se enfrentó a ellos, se hundieron por sí solos. Esto allanó el camino a la oposición frontal del histórico partido francés de extrema derecha, antes de producirse la aplastante victoria en la segunda ronda del líder francés más joven desde Napoleón Bonaparte (1769-1821).

 

Algunos[4] han subrayado todas las circunstancias favorables que llevaron a una victoria impensable aún cuatro meses antes de las históricas elecciones. No vieron en ello sino la increíble oportunidad de un ambicioso al que todo sonreía. No obstante, hay que señalar sobre todo que Macron supo anticipar el momento oportuno y aprovechar las oportunidades favorables con el fin de ganar la mayoría de los votos. Durante la Antigüedad, los griegos calificaban como kairós (καιρός) este “momento oportuno” que constituye un punto de inflexión decisivo.

 

En este artículo, examinaremos este concepto de filosofía política a la luz de la campaña presidencial de E. Macron (2016-2017). En primer lugar, consideraremos las raíces históricas y las evoluciones epistemológicas de un concepto que apareció en el primer milenio antes de J.-C. A continuación, mostraremos cómo el futuro presidente francés aprovechó la secuencia de acontecimientos para acceder a la magistratura suprema aprovechando todos los momentos oportunos que marcaron su candidatura a la presidencia. Finalmente, repasaremos las derivas del kairós consideradas y ya condenadas desde la antigua Grecia a través del concepto de hibris y también del mal uso del concepto mismo en una pura práctica comunicacional.

 

I - El concepto de kairós (καιρός) en la antigüedad griega 

 

En “Kairós, l'a-propos et l'occasion”, obra que sigue a su tesis sobre el concepto griego, Trédé-Boulmer (2015)[5] presenta la evolución semántica, desde el siglo VIII hasta finales del IV a.C., de una noción compleja.

 

En Homero, el adjetivo kairios califica un punto neurálgico del cuerpo cuya lesión puede llevar a la muerte (Lloyd, 1972). Kairós primero tuvo que designar un punto decisivo, definido espacialmente luego temporalmente, un punto que inmediatamente parece ambivalente, fatal o favorable. En sus épicas escenas de duelos y combate, la Ilíada menciona en numerosas ocasiones el concepto vinculando mètis y kairós. En este contexto, Détienne y Vernant (1974) subrayan cómo el cochero, el piloto del barco, el alfarero, en busca del momento favorable y crítico – el kairós – utilizaban este instinto aplicado a realidades cambiantes, esta inteligencia astuta y multiforme, que es la mètis (Trédé-Boulmer, 2015). El arte político no está lejos en la medida en que la idea de aprovechar el momento adecuado, la oportunidad adecuada, aparece con fuerza.

 

En el tiempo arcaico, en Hesíodo y Píndaro, el kairós de la oportunidad se convirtió en una noción ética. El concepto está ligado a la idea de zanjar, juzgar y decidir. El poeta Píndaro le da su valor estético haciendo de kairós el principio de su poética. Con el desarrollo de las "artes" (technai), el pensamiento del siglo V, confiado en los poderes de la razón, medita sobre el kairós, punto de aplicación del conocimiento en un mundo siempre cambiante.

 

Juntas, las ciencias de la medicina y de la retórica tanto como las de la estrategia y de la política buscan establecer reglas para captar el kairós, la clave del éxito. Este último define entonces un arte de la medida y un arte del tiempo. Aunque limitada en Heródoto, la noción ocupa un lugar central en Tucídides: la historia de la guerra del Peloponeso se convierte en gran parte en una historia de "oportunidades" reconocidas o perdidas (Heródoto, 1964)... En el siglo IV a. C., este optimismo intelectual se desvanece. Aeschines y Demóstenes se oponen a propósito  del papel del kairós en la política.

"Para Demóstenes, el kairós suele ser puntual: es el momento decisivo que, si va precedido de la reflexión (euboulia) y de los preparativos necesarios, debe permitir cambiar la situación a su favor. En Esquines, la palabra toma un significado más general: designa el período, el momento, y tiende a convertirse en sinónimo de ta pragmata "la situación" o de to paron, el ‘momento presente’. » Trédé-Boulmer (2011: 1476)  

 

La noción de "kairós", de "momento favorable, disponible", implica una concepción particular de la idea de tiempo (Moutsopoulos, 1991) y de un modo de ser, activo o reactivo. Esta actividad o reactividad se expresa sobre todo por una intencionalidad constantemente orientada a la búsqueda de un medio de actuación o adaptación a la realidad vivida en un entorno determinado. Se trata entonces de servir a un objetivo específico ya establecido. La inversión de los acontecimientos será ventajosa para quien sepa aprovechar la "oportunidad por los pelos" (καιρὸν ἁρπάζειν), como la mitología griega invita a hacerlo ya que este concepto se encarna también en un dios griego[6]. Romeyer Dherbey (1999) subraya el carácter divino del concepto. La repentina irrupción del kairós es un tiempo visitado por el dios marcado por la aparición de la luz. El hombre que lo toma siente el paso del dios en este "segundo de la eternidad" (Romeyer Dherbey, 1999) que dura el kairós.

 

El kairós se refiere así al curso del mundo, al azar, al curso impredecible de las cosas, pero también al conocimiento previo. El kairós no es nada sin el saber que permite reconocerlo. Es sólo un evento entre otros para el que no sabe. Sin embargo, para el que sabe, es lo que le revela su propio conocimiento, a través del choque de la realidad que se revela como significante[7] . En esto, el político que sabe reconocer y captar el kairós se impone entonces como un visionario, un estratega y también un hombre providencial que ha sabido leer en el caos de los acontecimientos el encadenamiento mecánico de un destino que él impone a todos.

 

Por eso, según Détienne y Vernant (1974), los filósofos griegos del siglo V a.C. abandonaron la idea de mètis, la artimaña de la inteligencia, pero conservaron la del kairós, que combina la inteligencia, el arte y la técnica que tienen la misma raíz en griego (technai). Porque la artimaña de Ulises no es suficiente para resolver un problema. También es necesario poseer un conocimiento basado en un arte/técnica (Hartog, 2017). Como señala Aristóteles (2014), la excelencia del conductor de tanque, del navegante o del político no se mide por el alcance de sus conocimientos, sino por su capacidad de prever y descubrir las trampas de antemano. Una vez que se da la oportunidad, el kairós significa el momento propicio que el buen piloto debe aprovechar cuando ha sido capaz de discernir de lejos la oportunidad que se le dará de ejercer su técnica (Détienne y Vernant, 1974: 214-215). 

 

De cara al kairós, E. Macron anticipó las oportunidades que sorprendieron a todos los demás candidatos en las elecciones presidenciales, así como a todos los franceses, a saber, el desencanto ante las renuncias del partido socialista en el poder, la radicalización del partido de oposición de derecha (sin prever su derrumbe) y la difuminación del partido centrista, dejándole todo el espacio.... Al hacerlo, las oportunidades que supo aprovechar le proporcionaron los medios para aplicar el plan que había diseñado y mostrado desde el principio: ganar la campaña presidencial francesa.

 

II – El ascenso fulgurante de E. Macron

 

Un año antes de la fecha de las elecciones presidenciales, E. Macron era miembro de un gobierno socialista en declive, bajo la autoridad del Presidente F. Hollande (2012-2017), que no había sabido imprimir realmente, en el espíritu de los franceses[8], una imagen presidencial. Hasta entonces, el ascenso de E. Macron había sido deslumbrante. Graduado del Instituto de Estudios Políticos de París (IEP Paris) en 2001, graduado de la ENA en 2004, se une al Partido Socialista entre 2006 y 2009. Tras una experiencia en la alta función pública francesa, se convierte en banquero de inversiones en Rothschild & Cie, donde es ascendido a socio en 2010. Durante la campaña presidencial de 2012, apoya, desde el principio, al candidato socialista F. Hollande, quien lo nombra secretario general adjunto del Elíseo desde el momento en el que asume el cargo.

 

Sin haber pasado por las urnas, ni ganado ningún mandato político en ese momento, E. Macron es nombrado dos años después Ministro de Economía, Industria y Nuevas tecnologías (2014-2016) del segundo gobierno del Sr. Valls[9]. Desconocido para el público en general, sus apariciones en la prensa durante las entrevistas aumentan su notoriedad. Le dan un tono que denota el discurso del gobierno y le permite destacarse ideológicamente del partido socialista, enredado en sus contradicciones ideológicas.

 

Sin embargo, su rango ministerial en términos de protocolo no le da muchas esperanzas de salirse de la línea. Además, como presidente saliente, F. Hollande es legítimamente quien encarna al partido socialista y quien puede legítimamente postular para un segundo mandato. E. Macron decide entonces desarrollar sus redes y crea, ex nihilo, una base política. En abril de 2016, funda su propio partido político, En Marche. El 30 de agosto de 2016, Emmanuel Macron anuncia su renuncia al gobierno y el 16 de noviembre de 2016, anuncia oficialmente su candidatura para las elecciones presidenciales.

 

En ese momento, E. Macron aparece como un pequeño candidato rodeado de fuerzas políticas tradicionales, poderosas y organizadas. Renunciando a un gobierno socialista en declive, es el líder y fundador de un neo-micro partido con muy pocos miembros y escazas finanzas. Su base ideológica, que aún no ha sido definida, sugiere que se encuentra en el centro de la escena política francesa. Además, E. Macron se enfrenta al partido de oposición de derecha Les Républicains[10], que, reforzado por la movilización durante las elecciones primarias de su candidato en el otoño de 2016[11] (cf. supra), parece más que nunca estar a las puertas del poder. Sin olvidar el Frente Nacional, partido de extrema derecha, que, en un contexto económico, social e internacional tenso, goza de opiniones muy favorables.

 

Sin embargo, sus oponentes directos se van hundiendo poco a poco, llevándose consigo sus partidos políticos existentes desde el inicio de la Quinta República Francesa (1958). Todo comienza el 1ro de diciembre, cuando el Presidente socialista F. Hollande anuncia que no se presentará a un segundo mandato. Este anuncio precipita la organización, en enero de 2017, de primarias socialistas en las que se enfrentan varias corrientes contradictorias. Aunque ex-miembro del gobierno, el candidato E. Macron no quiere estar asociado a esta primaria de izquierdas y prefiere salir de la "guerra de clanes" que, según él, socava al partido y a la izquierda en general[12]. Habiendo aprovechado todas las oportunidades para distinguirse, decide continuar su proyecto de llevar a cabo una campaña presidencial en solitario fuera de cualquier partido tradicional. La siguiente secuencia de eventos ilustrará su determinación y habilidad para anticipar y aprovechar el fracaso de sus oponentes.

 

III – El anticipado fracaso del gobierno del Presidente Hollande

 

La historia dirá si el mandato de cinco años de F. Hollande, ex-primer secretario del Partido Socialista, habrá sido el canto del cisne de este partido, nacido en 1905[13], pero moribundo  si no muerto[14] para algunos en 2018. La elección presidencial de 2017 puso fin a su lucha interna. Durante las primarias tituladas torpemente "La bella alianza", dos izquierdas chocan y se oponen: una izquierda revolucionaria y una izquierda reformista. La cuestión de la unidad del Partido Socialista Francés siempre se ha planteado desde su creación incubando en su seno tendencias difíciles de conciliar (Becker y Gandar, 2005).

 

A.    El fracaso del partido socialista francés

Simbolizando una mutación social-liberal no asumida[15], los resultados de la primera ronda de la primaria socialista no son sorprendentes (Tabla n°1). Destacan dos candidatos que representan estas dos corrientes: M. Valls, Primer Ministro del Presidente Hollande y B. Hamon, ex-ministro que dimitió de su cargo para asumir el papel de "frondeur", es decir, en oposición a la política del Presidente Hollande, y encarnar así una izquierda de "combate".

 

Tabla n°1: Resultados de la 1ª vuelta de la primaria de la izquierda (22/01/2017)

B. Hamon

M. Valls

A. Montebourg

V. Peillon

F. de Rugy

S. Pinel

J.-L. Bennahmias

36,63%

31,90%

17,58%

6,93%

3,91%

2,02%

1,02%

Referencia: Haute Autorité des primaires citoyennes.

 

Una semana más tarde, los resultados de la segunda vuelta de las primarias de izquierda (Tabla n°2) llevaron a la elección de un candidato que representaba a la izquierda revolucionaria, Benoit Hamon, a expensas de la izquierda gubernamental, representada por el ex-Primer Ministro, Valls.

 

Tabla n°2: Resultados de la 2ª vuelta de la primaria de la izquierda (29/01/2017)

B. Hamon

M. Valls

58,69%

41,31%

Referencia: Haute Autorité des primaires citoyennes.

 

Este resultado tan escindido, no permite federar a las dos izquierdas juzgadas como irreconciliables[16] por uno de los finalistas. Poco después, la entronización oficial del candidato Hamon, el 6 de febrero de 2017, sufrió la falta de apoyo de esta izquierda gubernamental. Sólo la Ministra de la Educación Nacional acompañada por cinco Secretarios de Estado estarán presentes en esta entronización. Ni el Presidente de la República ni su Primer Ministro apoyarán la elección del candidato de la primaria.

 

Al final, la conjunción de una opinión pública muy negativa de los electores contra el Presidente Hollande[17] y una guerra interna en el Partido Socialista con una ausencia total de apoyo de su candidato, lleva al candidato Hamon a iniciar la batalla electoral presidencial con unas intenciones de voto muy bajas (Tabla n° 3).

 

Tabla n°3: Intenciones de voto para las elecciones presidenciales

 

J.-L.  Mélenchon

B. Hamon

E. Macron

F. Fillon

M. Le Pen

Otros

Partidos

France Insoumise

Parti Socialiste

En Marche

Les Républicains

Front National

6 otros candidados

Ideología política

Extrema izquierda

Izquierda

Centro

Derecha

Extrema derecha

Feb. 2017

12%

14%

23%

18%

26%

7%

Abril 2017

15%

10%

25%

17,5%

25%

7,5%

Referencias: Cevipof, février 2017; Ipsos Sopra Steria, 4 avril 2017.

 

Estas encuestas tuvieron, para gran perjuicio del Partido Socialista y su candidato, un valor predictivo confirmado por los muy bajos resultados obtenidos durante la primera vuelta de las elecciones presidenciales (tabla n°4). Gradualmente, los partidarios del gobierno fueron abandonando al candidato oficial del Partido Socialista para unirse o apoyar a E. Macron.

 

Tabla n°4: Resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2017

(% de los votos emitidos)

 

J.-L. Mélenchon

B. Hamon

E. Macron

F. Fillon

M. Le Pen

Partidos

France Insoumise

Parti Socialiste

En Marche

Les Républicains

Front National

Ideología política

Extrema izquierda

izquierda

Centro

Derecha

Extrema derecha

Votos

19,58%

6,36%

24,01%

20,01%

21,30%

Referencia: Ministère de l’intérieur français.

 

Con 6,36% de los votos emitidos en la primera vuelta, el candidato del Partido Socialista obtiene el nivel más bajo alcanzado por el Partido Socialista desde 1969. Fue peor que el 21 de abril de 2002 cuando el candidato del Partido Socialista Francés no se clasificó para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. La situación en 2017 es catastrófica y se cuestiona claramente la supervivencia del Partido Socialista.

 

B.    El confinamiento de la extrema izquierda

De la izquierda del gobierno a la extrema izquierda, representada por el ex-senador socialista J.-L. Melenchon, el espacio político de E. Macron creció a lo largo de la campaña a medida que se desmoronaban las intenciones de voto para el candidato socialista.

 

Pero si el oponente socialista de E. Macron desaparece gradualmente, debe contener la progresión del candidato de la extrema izquierda. De hecho, éste logró poco a poco encarnar ideológicamente a toda la izquierda. En un verdadero juego de vasos comunicantes: cuanto más sube el candidato de France Insoumise (Francia Insumisa) en las encuestas, más cae el candidato del Partido Socialista, hasta el punto de relegar a este último muy lejos en las intenciones de voto (Tabla n°5).

 

Tabla n°5: Intenciones de voto en enero de 2017 (evolución en febrero de 2017)

J.-L. Melenchon

B. Hamon

15% (+ 3,5%)

10% (-2 ?5%)

Referencia: Cevipof, 4/3/2017

 

Liderado por un ex-senador del Partido Socialista y exministro del Presidente François Mitterrand (1981-1995), el partido France Insoumise encarna desde su fundación en febrero de 2016 una nueva izquierda revolucionaria. Además representa oficialmente al partido comunista que se ha vuelto marginal en el panorama político francés. Su líder y tribuno carismático, J.-L. Mélenchon, conduce al movimiento a la cima convirtiéndose en una voz para los más desfavorecidos. Sus contiendas mediáticas hacen las delicias de una parte del cuerpo electoral que ya no ve a la izquierda tradicional como un medio para defender sus intereses (Tabla n°6).

 

Tabla n°6: Evoluciones de las intenciones de voto para J.-L. Mélenchon

durante la campaña de 2017

 

Fecha

25/10/16

9/3/17

18/3/17

Resultados de la 1ra vuelta de las elecciones presidenciales (23/04/17)

J.-L. Mélenchon

13%

12%

17%

19,58%

Referencia: Elabe, Kantar, Paris Match.

 

La falta de compromiso del líder de la extrema izquierda le da una especie de virginidad y credibilidad política. Contestatario, prometiendo establecer una Asamblea Constituyente sobre el modelo de la Revolución Francesa de 1789 para reemplazar la Constitución de 1958,  Mélenchon seduce en un contexto donde la mejora de la situación económica, así como las derrotas y negaciones de los socialistas en el poder, sellan el fracaso de la izquierda gubernamental.

 

A lo largo de marzo de 2017, las intenciones de votos para la France insoumise hacen del partido extremista el tercero, o incluso el segundo, de la primera vuelta, detrás de Marine Le Pen, representante de la extrema derecha. A sus 66 años, el candidato J.-L. Mélenchon innova incluso en la puesta en escena de sus mítines. Multiplica los encuentros gigantes al aire libre, animados como un "stand up", y protagoniza mítines a distancia gracias a hologramas de su persona que dan una imagen moderna y de alta tecnología del candidato.

 

Pero el discurso de J.-L. Mélenchon provoca críticas. Sus posiciones sobre la despenalización del consumo de cannabis no convencen a una parte del electorado, que al final se refugiará en la abstención. A pesar de la repetida invitación de B. Hamon a forjar una unión de izquierda, digna de la organizada por F. Mitterrand que había permitido la victoria del partido socialista y del partido comunista en 1981, la France insoumise rechazará toda sumisión y compromiso con el antiguo aliado socialista. Seguro de su futuro éxito y de su estrategia, J.-L. Mélenchon se basa en encuestas de opinión que lo sitúan a las puertas de la clasificación para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.

 

Finalmente, las ideas social-liberales que se desatan en la campaña electoral en 2017 en Francia reducen la ambición de J.-L. Mélenchon que obtendrá la cuarta posición de la primera vuelta de las elecciones presidenciales. A posteriori, añadiendo sus votos a los del representante del Partido Socialista, la calificación para la segunda vuelta habría sido posible (cf. tabla n°5). Al día siguiente de la primera vuelta, los candidatos perdedores de la izquierda volvieron a comportarse de manera diametralmente opuesta: el candidato socialista pidió el voto para E. Macron con el fin de bloquear a la extrema derecha, mientras que el candidato de la extrema izquierda se negó a tomar partido. Así, 2017 anuncia el fin de las fuerzas de la izquierda, que caen en la derrota.

 

Implicado en su campaña presidencial, enfrentado a situaciones ambiguas y sin precedentes cuyo resultado sigue suspendido, E. Macron anticipó el colapso del partido socialista en torno a la histórica división revolucionaria/reformista. Al mismo tiempo, logró contener la progresión de la extrema izquierda, que los electores consideraron demasiado radical y peligrosa. Al hacerlo, aseguró su control sobre el curso de los acontecimientos porque fue capaz de prever, más allá del presente inmediato, una porción más o menos gruesa del futuro. Pero ganar en su ala izquierda no fue la tarea más difícil, en tanto en cuanto el PS había decepcionado y había sido denunciado bajo la presidencia de Hollande y en tanto que la France insoumise, por sus excesos, no había sido capaz de convencer más allá de un electorado radical. E. Macron tenía aún que convencer al electorado francés para que eligiera entre él y el primer partido de la oposición en Francia que esperaba impaciente su oportunidad desde 2012: Les Républicains.

 

 

IV – Un centro que se ofrece y una derecha que se sabotea

 

Desde las elecciones presidenciales de 2012, el partido de centro francés Modem, a través de su líder F. Bayrou, había sido marginado en la escena política nacional. F. Bayrou tuvo que concentrarse en su único mandato electoral como alcalde de una ciudad de provincia (Pau), habiendo perdido también su elección para ser diputado ese mismo año. Además, el Presidente Sarkozy (2007-2012) había aprovechado esta pérdida de influencia a nivel nacional para crear un partido centrista "amigo", la UDI, que podría atraer a una parte del electorado centrista en detrimento del Modem. Preveía entonces que la batalla electoral de la derecha pasaría por la atracción de los electores del centro.

 

A.    El acuerdo de E. Macron con el partido de centro

En el pasado, el Modem de F. Bayrou había sido candidato en las últimas tres elecciones presidenciales. Su resultado (18,7% de los votos emitidos) en 2007 había sido tan alto que lo había convertido en el tercer hombre en esta elección, pilar del sistema político francés. Las dos otras candidaturas lo habían relegado a un lugar menos honorable (en 2002: 6,84% de los votos emitidos; en 2012: 9,13% de los votos emitidos). Por otra parte, su margen de maniobra en el centro de la escena política francesa se había reducido, aún más desde la creación en 2012 de una segunda fuerza centrista política, la UDI (Unión de Demócratas Independientes). 

 

De hecho, sin un mandato nacional entre 2012 y 2017, el líder del centro penó por hacer oír su voz y su diferencia bajo la presidencia Hollande (2012-2017) al que había sostenido durante la segunda vuelta presidencial en 2012. Además, en vísperas de una nueva elección presidencial en 2017, surgió la cuestión de una nueva campaña para un partido que ahora era marginal y financieramente débil. 

 

Por eso, a pesar de su determinación, F. Bayrou duda muy poco en unirse a E. Macron. La ausencia de la participación de Macron en la primaria de izquierda tranquiliza a F. Bayrou, que se niega a participar también a la primaria de derecha (cf. infra). Los dos contendientes centristas, al ser independientes de cualquier vínculo con cada uno de los partidos políticos tradicionales, firman un acuerdo político en febrero de 2017. Este acuerdo, que dio a E. Macron el liderazgo sobre el centro, impulsa su candidatura (Tabla n°7). Una vez más, pero en un contexto diferente, E. Macron supo aprovechar el momento favorable para lograr una fusión/absorción política y asumir un innegable liderazgo en el centro.

 

Tabla n°7: El efecto Bayrou en la candidatura de E. Macron

(evolución de las intenciones de votos: enero vs febrero 2017)

 

E. Macron

F. Fillon

B. Hamon

+4%

-2%

-1%

Referencia: Kantar Sofres One Point (26/02/2017).

 

Pero este acuerdo, si fue decisivo para E. Macron, fue inmediatamente devastador para el candidato de la izquierda de gobierno, B. Hamon y especialmente para el de la derecha, F. Fillon, en términos de intenciones de voto (Tabla n°8). De hecho, cuando se anunció este acuerdo, el candidato de derecha, F. Fillon, también quiso firmar un nuevo acuerdo con el otro partido centrista, muy minoritario, UDI. Pero este último acuerdo con la UDI no le permitió contrarrestar el ascenso de E. Macron. No solo tal acuerdo fue casi inútil sino que al mismo tiempo F. Fillon comenzó a verse envuelto en la revelación de casos de corrupción que lo acompañaron hasta el final de su campaña presidencial.

 

B.    La caída inesperada de la derecha

En la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 23 de abril de 2017, F. Fillon obtuvo el tercer lugar con un 20,01% de los votos, detrás de E. Macron y M. Le Pen. Le faltan 465.497 votos para pasar a la segunda vuelta. Fue una ducha de agua fría para el campo de la derecha que, desde la elección de F. Fillon en las primarias, ya creía haber obtenido la victoria presidencial final. En efecto, vencedor incontestable de la primaria de la derecha durante el otoño 2016, F. Fillon era considerado como el favorito para ser presidente. Pero su imagen de candidato conquistador, sin oposición real, seguro de su victoria, se desmigaja totalmente a medida que se desmoronan sus apoyos a partir de finales de enero de 2017.

 

El caso empieza con el artículo publicado en el periódico satírico de investigación, Le Canard enchaîné, el 25 de enero de 2017. Se afirma que la esposa del candidato, la Sra. P. Fillon, había percibido aproximadamente 500.000 euros brutos por un trabajo de asistente    parlamentaria de su marido de 1998 a 2002 y luego en 2012, y después del adjunto de su esposo, el Sr. Joulaud, de 2002 a 2007. Sin embargo, se sospecha que este trabajo era ficticio. El mismo día del anuncio en el periódico, la fiscalía financiera francesa abre una investigación preliminar por malversación de fondos públicos, abuso de bienes sociales y ocultación de estos delitos.

 

Una semana después, una nueva revelación especifica el importe de los pagos: no es de 500.000 euros sino de 831.440 euros brutos, la suma recibida por P. Fillon como asistente parlamentaria. Por otra parte, parece que los propios hijos de la pareja han beneficiado a su vez de fondos públicos por diversas misiones efectuadas, cuya realización sería difícil probar. Empleados como colaboradores parlamentarios por el Senador Fillon entre 2005 y 2007, las sumas acumuladas pagadas a la esposa y a los hijos de François Fillon como colaboradores parlamentarios alcanzarían aproximadamente los 900.000 euros brutos.

 

F. Fillon pierde el control de su campaña. El mundo político está pendiente de la publicación semanal del periódico satírico y otros medios de comunicación que transmiten y alimentan lo que se convierte en una verdadera serie político-mediática. Para un candidato que pide a los franceses que hagan esfuerzos para reducir la deuda del país, la candidatura de F. Fillon se complica cada vez más. A pesar de ello, el candidato esconde la cabeza y se niega a dimitir. Voces discordantes en su propio campo comienzan a escucharse a principios de febrero, sin éxito. Sus partidarios más cercanos, a principios de marzo, deciden uno por uno dejar de participar en su campaña. Las semanas se suceden y se asemejan para el campo de Fillon, que empieza a disociarse seriamente de su candidato cada vez más aislado en su propio campo. Las revelaciones sobre los contactos de F. Fillon con la comunidad empresarial rusa a través de su empresa de consultoría “2F Conseil” despiertan la emoción de la opinión pública. Definitivamente debilitan la imagen del candidato que termina diciendo que todo está dirigido por un gabinete secreto que trabaja para el Presidente de Hollande....

 

F. Fillon es finalmente imputado el 14 de marzo de 2017 por "malversación de fondos públicos", "complicidad y ocultación de malversación de fondos públicos", "complicidad y ocultación de abuso de bienes sociales" e "incumplimiento de la obligación de declarar ante la Alta Autoridad  a cargo de la transparencia de la vida pública". El 16 de marzo de 2017, la investigación es ampliada para incluir la sospecha de tráfico de influencias. Tras las revelaciones sobre los múltiples casos, las intenciones de voto para F. Fillon en las elecciones presidenciales de 2017 disminuyen de cinco o seis puntos el 1 de febrero en comparación con el mes anterior, situándose ahora en el mismo porcentaje que el de  E. Macron. La elección, considerada como cosa hecha para el candidato de derecha, de repente se hace difícil de ganar (Tabla n°8).

 

Tabla n°8: Intenciones de voto para F. Fillon

Fin de noviembre 2016

Principio de Enero 2017

Principio de Febrero 2017

16 de Febrero 2017

25 de Marzo 2017

30%

25%

22%

17,5% (3eme)

17% (3eme)

Referencias: Elabe, Cevipof, Bva, Elabe.

 

A lo largo de estas revelaciones de corrupción, E. Macron no participa y apenas comenta los problemas de su oponente. Oficialmente, deja que "la justicia haga su trabajo". Espera pacientemente a que la oportunidad se produzca. El fracaso de F. Fillon es inevitable desde el momento en que se anuncian las primeras revelaciones, porque la imagen resultante está en total contradicción con el discurso del candidato que se presentaba como un dechado de virtudes. E. Macron supo aprovechar el kairós "que da a los más débiles los medios de triunfar sobre los más fuertes, a los más pequeños de prevalecer sobre los más grandes" (Détienne y Vernant, 1974: 32).

 

 

V – El infranqueable "techo de cristal" de la extrema derecha y la victoria final de E. Macron

 

Fue en 2012, durante la campaña electoral parlamentaria, cuando la expresión "techo de cristal" se aplicó oficialmente por primera vez al partido del Front National. En ese momento, la líder del partido, Marine Le Pen, está convencida de que "rompimos el techo de cristal". Desde entonces, romper el techo de cristal se ha convertido en una obsesión para el partido de extrema derecha: se trata de convertirse en un partido respetable y creíble ante los franceses para tomar el poder. La elección de Marine Le Pen como candidata presidencial justifica esta ambición de unir al partido FN una parte del cuerpo electoral más atraído por la personalidad de la candidata que por su programa. El intento de “normalizar” su oferta política al inicio de la campaña presidencial parece arraigar en la opinión pública. El apellido de la candidata también se olvida a favor de su nombre solamente (Tabla n°9).

 

Tabla n°9: Intenciones de voto para M. Le Pen en 2017

Enero 2017

Febrero 2017

Marzo 2017

25%

26%

26%

Referencia: Elabe.

 

Poco a poco, las intenciones de voto se estabilizan a pesar de los casos judiciales que se aceleran en este período electoral. De hecho, se han abierto varias causas[18] contra la líder FN. Pero paradójicamente, su electorado le sigue siendo fiel en el mismo momento en que F. Fillon, alcanzado por otros casos de corrupción, se derrumba en las urnas (tabla n°10).

 

Tabla n°10: Comparación de las intenciones de voto entre F. Fillon y M. Le Pen

(Evolución entre Diciembre 2016 / Marzo 2017, en %)

F. Fillon

-12,5%

M. Le Pen

-2%

Referencia: Cevipof.

 

Aunque la candidata de extrema derecha no pierde demasiadas intenciones de voto y sigue calificada para la segunda vuelta, parece no obstante alcanzar su nivel más alto, en opinión del 26 % aproximadamente (Cevipof, abril de 2017).

 

En abril de 2017, M. Le Pen llega a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales (cf. la tabla n°4). Debe entonces enfrentarse a E. Macron en un debate televisual. Este último, a su vez, ha eliminado o visto  caer a todos sus oponentes políticos. Ha sabido anticipar y esperar sus errores (F. Fillon, candidato Les Républicains), provocar su radicalización (B. Hamon del Partido Socialista y J.-L. Mélenchon de France insoumise) y finalmente crear las condiciones para un acuerdo favorable con el partido del centro a fin de adquirir una base electoral (F. Bayrou, Modem). Ha sabido aprovechar todas las oportunidades para avanzar hasta la segunda ronda aprovechando la amplitud de sus conocimientos políticos, poniendo en práctica su capacidad de predicción para descubrir las trampas. Todos estos momentos forman parte del kairós ya que se suceden desde el verano anterior y le son favorables. Por lo tanto, el debate en la segunda vuelta entre los dos candidatos es decisivo y marca la última etapa de su accesión a la presidencia.

 

Durante este debate, E. Macron muestra dominio y logra contener a la candidata de extrema derecha. Esta última, superada, ve reducidas sus posibilidades de ganar tras fallar en su actuación. Las medidas de la opinión adoptadas al día siguiente de este debate son inapelables. M. Le Pen aparece a veces agresiva, a veces "ligera" en sus comentarios, lo que lleva a darle una imagen de opositora de extrema derecha y no de presidenta (Tabla n°11).

 

Tabla N°11: Opinión favorable de los franceses después del debate televisual

E. Macron

M. Le Pen

63%

34%

Referencia: Elabe, 4/5/17

 

M. Le Pen no ha sabido aprovechar el momento de este debate para convencer a los franceses. La que había sido acreditada a lo largo de la campaña con resultados que la situaban  en 2º o 1er puesto, ve cómo el crédito almacenado durante estos años de liderazgo dentro del FN se derrumba en dos horas y media de emisión. La segunda vuelta de las elecciones presidenciales no será sino una formalidad para el candidato E. Macron (Tabla n°12), quien reunirá a todo el electorado republicano en torno a él.

 

Tabla n° 12: Resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2017

E. Macron

M. Le Pen

66,10%

33,90%

Referencia: Ministère français de l’Intérieur.

 

Durante esta campaña, E. Macron logró mover todas las líneas políticas establecidas desde el advenimiento de la Quinta República francesa en 1958. Redefine el entorno de todos los partidos políticos y cumple el deseo de cualquier líder centrista, a saber, federar los dos polos políticos de la izquierda y la derecha. Aprovechando una sucesión de situaciones oportunas en las que el campo socialista y la derecha clásica se han desgarrado, E. Macron se convierte, a menos de 40 años, en el presidente de la República Francesa.

 

 

Conclusión: ¿del kairós al hibris?  

 

Todos los factores mencionados anteriormente convergieron y condujeron a la victoria de E. Macron. Paulatinamente, durante la campaña, se abre ante él un horizonte, ofreciéndole la silla presidencial de Charles de Gaulle y de François Mitterrand.

 

Pero este momento de convergencia es, por definición, efímero. El kairós pertenece al orden del mito, aquí tomado en el sentido de Barthes (1970), es decir, la ilusión que puede dar crédito a una maestría total. Como hemos visto antes, el concepto de kairós evolucionó mucho durante el milenio antes de Cristo. Sin embargo, su evolución continúa con el principio de la era cristiana. En efecto, en los textos cristianos escritos originalmente en griego, Kairós, con mayúscula, significa la Encarnación mayor. En las Epístolas, como en el Nuevo Testamento o en el Apocalipsis, se menciona a Jesús Cristo como el Kairós de ahora. Se sigue identificando el momento oportuno con el momento de la Revelación: “Entonces Jesús les dijo: Mi tiempo [Kairós] aún no ha llegado, mas vuestro tiempo siempre está presto (…) Subid vosotros a la fiesta; yo no subo todavía a esa fiesta, porque mi tiempo [Kairós]  aún no se ha cumplido”[19]. A partir de la figura de Cristo se abre un nuevo tiempo mesiánico (Hartog, 2017) que impulsa una acción salvífica o sea la intervención decisiva de Dios a través de su Encarnación redentora y de la Parusía final[20]. El nuevo entendimiento cristiano del Kairós le da una dimensión escatológica.

 

Esta evolución conceptual mesiánica se aplica también a cualquier hombre/mujer político que sabe sacar provecho de situaciones y acontecimientos. En efecto, un sentimiento de invulnerabilidad e infalibilidad puede instalarse en la mente, la cual cree poseer el control de los acontecimientos. El sistema en el que opera también lo fomenta. Frente a su saber y technai que generaron su propia omnipotencia, sus oponentes se callan, los críticos desaparecen, ya sea por autocensura o por presión. La ausencia de una mirada exterior que atenúe el poder conduce a la ceguera y, en consecuencia, a sesgos cognitivos, es decir, a errores de juicio.

 

El trabajo universitario sobre estos sesgos se origina en la Behavioral Decision Theory (BDT) y fue iniciado por Simon (1957) y retomado por Kahneman, Slovic y Tversky (1982). Una revisión de la literatura sobre este tema por Pham (1996) muestra que la alteración del juicio es causado por la falta de formación de creencias y la subsiguiente estructuración de decisiones. De hecho, el individuo, demasiado seguro de sí mismo, termina creyendo que sólo su intuición es válida, y ¿por qué no debería serlo en vista de la representación de su saber y poder? Así que este individuo quiere ir rápido, demasiado rápido. A través de atajos cognitivos, llamados heurísticos, inadvertidamente comete errores en estimaciones y predicciones.

 

A partir de esta base sesgada en términos de representación, el individuo se deja entonces engañar por una representación mental distorsionada del problema de toma de decisiones que se le presenta. Dado que su marco de toma de decisiones es, por lo tanto, incompleto, sus decisiones son inadecuadas. Ya sea en las humanidades, en las ciencias de la gestión (Bazerman, 1994; Brûlé-Gapihan y Boudes, 2015) o simplemente en las ciencias médicas (Mc Cormick, 1996; Dieguez, 2009), parece que las decisiones precipitadas son numerosas. En ciencias políticas, dos autores han trabajado para explicar este fenómeno. Owen y Davidson se refieren a este fenómeno como "síndrome de hibris". Estos autores enumeran 14 síntomas del síndrome (Tabla n°13). Para considerarse afectado por este síndrome, deben presentarse al menos tres de ellos.

 

Tabla n°13 : Síndrome de hibris

·         Inclinación narcisista a ver el mundo como un escenario en el que ejercer el poder y buscar la gloria.

·         Predisposición a realizar acciones que puedan presentar al individuo bajo una luz favorable, es decir, para embellecer su imagen.

·         Excesiva atracción por la imagen y la apariencia.

·         Forma mesiánica de evocar la actualidad y tendencia a la exaltación.

·         Identificación con la nación u organización, hasta el extremo de que el individuo crea que su punto de vista e intereses son idénticos a los de la nación u organización.

·         Tendencia a hablar de sí mismo en tercera persona o a utilizar el "nosotros" real.

·         Exceso de confianza en el propio juicio y desprecio por las críticas y consejos de los demás.

·         Impresión de omnipotencia sobre lo que el individuo es personalmente capaz de lograr.

·         Creencia de que en lugar de rendir cuentas a sus colegas o a la opinión pública, el único tribunal ante el que  se tendrá que responder será el de la historia.

·         Creencia inquebrantable de que la sentencia de este tribunal le será favorable.

·         Pérdida de contacto con la realidad, a menudo asociada con el aislamiento progresivo.

·         Agitación, descuido e impulsividad.

·         Tendencia a dar importancia a su "visión", a su decisión, lo que les evita tener en cuenta los aspectos prácticos o evaluar los costes y consecuencias.

·         Incompetencia "hibrística", cuando las cosas salen mal porque la excesiva confianza en sí mismo ha llevado al líder a descuidar el funcionamiento habitual de la política y la ley.

 

 

Las realidades pueden surgir y trasladar el poder a otro escenario, como consecuencia de la ceguera que proporciona el hibris (ὕβρις). Bien representado por antiguos pensadores como Platón (1940) o Aristóteles (2014), el hibris retoma esta idea de un poder que se sube a la cabeza y que para quien, pretendiendo ser igual a los dioses, es víctima de ello, le hace comenzar la caída de su omnipotencia (Vernant, 1994)... En los textos antiguos, es Némesis, el Dios de la venganza y de la justicia, quien estaría detrás de todo ello para calmar el ardor de quien, sin restricciones, se sentiría todopoderoso.

 

El ascenso fulgurante de E. Macron no se había visto en la historia política francesa desde la Revolución Francesa de 1789. Fueron necesarios varios factores para que este candidato alcanzara el escalón más alto del poder. Su toma de riesgos, en primer lugar, lo llevó a renunciar y a distanciarse de su mentor, el entonces Presidente en ejercicio, F. Hollande. En segundo lugar, el marasmo de un gobierno de izquierdas atrapado entre sus viejos demonios revolucionarios, presa del social-liberalismo, que le dio un espacio apreciable a su izquierda.

 

A su derecha, la increíble inversión de la situación del candidato F. Fillon atrapado en los asuntos de corrupción, destruyó toda esperanza de cruzar el umbral de la segunda vuelta. Finalmente, la candidata del FN que, demasiado segura de sí misma, perdió la esperanza de convencer y atraer votos fuera de su electorado de extrema derecha. Todos estos eventos combinados permitieron a E. Macron aprovechar el kairós necesario para conquistar el poder. Ahora, es de esperar que no caiga en el hibris durante su ejercicio.

 

Más allá del hibris, Trédé-Boulmer (2014) relata otra deriva de la práctica política del kairós, presente desde el siglo IV a.C. En aquella época, el concepto dejó gradualmente las orillas de la política para ganar las del arte oratorio. Para gran disgusto de Platón (1940), que los condena en sus libros epónimos, Protágoras y Gorgias descubren el valor del kairós y del eikos (lo verosímil). En la siguiente generación, Alcidamante e Isocrates dan cada uno su definición del kairós: para el uno, se confunde con el arte de la improvisación; para el otro, con el arte del discurso escrito que compite con la poesía (Trédé-Boulmer, 2014)... El arte político se reduce entonces al arte oratorio y lo limita a la pura práctica comunicativa. El kairós es entonces el fino conocimiento que el retórico tiene del mejor momento en el que se puede inclinar una audiencia, manipular una multitud (Le Bon, 2003)... En la era de los medios sociales (Facebook, Twitter, etc.), este concepto que se remonta a la filosofía y a los mitos de la antigua Grecia parece cobrar máxima actualidad.

 

 

Bibliografía:  

 

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Brûlé-Gapihan, E. Boudes M. 2015. « Pécher par excès de confiance ». Revue Française de Gestion. issue 248. p.153-169.

 

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Trédé-Boulmer, Monique. 2015. Kairos : l'à-propos et l'occasion. Paris: Les Belles Lettres.

 

Vernant, Jean-Pierre. 1994. Mythe et pensée chez les grecs. Paris: Editions la découverte.

 

 



[1] Quisiéramos agradecer a la Lic. Gema Guttierez-Larripa por su lectura y su ayuda.

[2] Más allá de la referencia al dios romano, que se confunde en la tradición literaria latina con el dios griego Zeus, Júpiter se refiere también al puesto de mando ‘Júpiter’ situado bajo el palacio presidencial francés del Elíseo. Este búnker permite estar en contacto en cualquier circunstancia con las demás entidades gubernamentales, francesas y extranjeras, así como con los centros de mando militar.

[4] Ver los diferentes artículos, entre agosto de 2016 y abril de 2017, de los tres periódicos de referencia franceses: Le Figaro, Le Monde y Libération.

[5] La tesis de Monique Trédé-Boulmer fue realizada bajo la dirección de Jacqueline de Romilly.

[6] Hijo menor de Zeus, Kairós es el dios de la ocasión oportuna en contraposición a Cronos, que es el dios del tiempo. A menudo se le representa como un hombre joven con un grueso mechón de pelo en la parte delantera y una cabeza calva en la parte trasera. Se trataba de "agarrarlo del pelo" cuando pasaba... siempre rápido.

[8] Sólo el 4% de los franceses están satisfechos con la acción de Hollande en Octubre de 2016. Referencia: Cevipof, oct. 2016.

[9] De origen catalán, Manuel Valls, diputado del Partido Socialista (2002-2012) y del Ministerio del Interior (2012-2014), es Primer Ministro del Presidente Hollande entre marzo de 2014 y diciembre de 2016.

[10] El partido político Les Républicains, LR, es el principal partido político de derecha en Francia desde su creación en 2015. Es el sucesor del partido RPR (Rassemblement Pour la République) activo entre 1976 y 2002, y luego de la UMP (Union pour la Majorité Présidentielle), a la que sustituyó en 2015. Jacques Chirac (RPR, 1995-2002; 2002-2007) y Nicolas Sarkozy (2007-2012) son los dos últimos presidentes de este partido.

[11] Durante la primaria de derecha y la primaria central, más de 4 millones de votantes votan en la primera y segunda vuelta de las primarias (20 y 27 de noviembre de 2016). Referencia: Le Monde, 25/11/2016.

[13] El socialismo político francés se unifica en 1905 con la fusión de las corrientes socialistas (guesdistas, blanquistas, reformistas...) en la nueva sección francesa de la Internacional Obrera (SFIO). Fue el Congreso de Epinay en 1971 el que marcó la etapa más importante en la unidad y renovación del socialismo moderno francés.

[14] Declaración de M. Valls, Primer Ministro socialista (2014-2016), el 5 de septiembre de 2017: "Este Partido Socialista está muerto, queda atrás, no así su historia y sus valores, pero debe superarse a sí mismo". Référencias: RTL, 9 de mayo de 2017.

[15] A diferencia del Partido Social Demócrata alemán, que anunció su ruptura con el marxismo en el congreso "Bad-Godesberg" de 1959, no fue hasta principios de los años noventa cuando el PS francés abandonó toda referencia a la “revolución”.

[16] Esta opinión fue expresada por M. Valls en diciembre de 2016.

[17] Sólo el 4% de los franceses están satisfechos con la acción del Presidente Hollande durante el otoño 2016. Referencia: Cevipof, oct. 2016.

[18] En primer lugar, se trata de una sospecha de ocultación de desvío de fondos públicos y de complicidad de  fraude. El Tribunal de Apelación de París valida la investigación sobre una sospecha de sobrefacturación de las prestaciones contratadas durante la campaña presidencial de 2012. A continuación, en 2017, trece personas son imputadas, entre ellas dos vicepresidentes del FN (su tesorero W. de Saint-Just y J.-F. Jalkh), así como el partido en calidad de persona jurídica por encubrimiento de abuso de bienes sociales y complicidad de fraude. Al mismo tiempo, el caso de los supuestos empleos ficticios sigue su curso. Dos miembros inminentes del FN y de la campaña de M. Le Pen son inculpados: N. Bay (portavoz de la campaña), y D. Rachline, que se convertirá en el director de la campaña para las elecciones de 2017.

Por si fuera poco, surge otro caso. A petición del Parlamento Europeo, M. Le Pen tenía que devolver cerca de 300.000 euros, antes del 31 de enero de 2017, por haber "pagado con dinero público a ejecutivos del FN". De hecho, la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude considera que pagó dos puestos de asistentes parlamentarios ficticios. La acusación de empleos ficticios crece con la sospecha que se cierne sobre todos los asistentes parlamentarios de los diputados europeos del FN.

A finales de 2016, el Ministerio Público de París abre también una investigación por "abuso de confianza", "ocultamiento de abuso de confianza", "fraude estafa en banda organizada", "falsificación y uso de falsificaciones" y "trabajo oculto" a este propósito. En plena campaña presidencial, el 20 de febrero de 2017, tiene lugar un nuevo registro en la sede del FN; dos días después, M. Le Pen es llamada a declarar por los servicios de la oficina central para la lucha contra la corrupción y los delitos financieros y fiscales. Indica que no asistirá a ninguna citación policial o judicial antes de las elecciones parlamentarias del 11 y 18 de junio. Convocada el mismo día, su jefa de gabinete, C. Griset, es acusada de ocultación de abuso de confianza. Su guardaespaldas, T. Légier, también es detenido el mismo día, pero es puesto en libertad sin cargos. Marine Le Pen es citada a comparecer el 10 de marzo de 2017 por auto de procesamiento pero se negará a personarse, invocando la inmunidad parlamentaria. Los jueces piden al Parlamento Europeo que levante su inmunidad parlamentaria en abril de 2017. Finalmente, el 30 de junio de 2017, Marine Le Pen acude a la convocatoria de los jueces y se ve inculpada por abuso de confianza y complicidad en abuso de confianza.

 

[19] Juan 7:6, 7:8. Y también Actos 24:25 ; 1 Pedro 4:17 ; Apocalipsis 1:3, 11:18, 22:10.

[20] Definición propuesta por la Conferencia de Obispos de Francia (Conférence des évêques de France). Recuperado el 20 de abril de 2018: http://eglise.catholique.fr/glossaire/kairos/