Resumen:
En
1845, Karl Marx firma con el editor alemán Karl Leske un contrato para la
publicación de un libro titulado Crítica de la política y la economía
política. No parece que el filósofo tenga una idea muy clara de su proyecto
científico. En dos ocasiones, el editor cancela el contrato. Marx escribe, al
cabo de diez años, una Introducción (1857), y un "esbozo"
(1857-1858), los Grundrisse... Ambas obras no se publicarían hasta el siglo
XX.
Pero
Marx continúa trabajando y escribiendo. En 1857, declara su ambición en el
prólogo de la Crítica de la economía política mediante la presentación
de un plan general en seis "rúbricas". Diez años más tarde, solo
habrá tenido tiempo de escribir una parte de la primera rúbrica: es el Libro
I de El Capital.
Abstract:
In 1845, Karl Marx signed with the German
publisher Karl Leske a contract for the publication of a book entitled Critique
of Politics and Political Economy. It does not seem that the philosopher
has a very clear idea of his scientific project. On two occasions, the
publisher cancels the contract. Marx writes, after ten years, an Introduction
(1857), and an "outline" (1857-1858), the Grundrisse... Both
works would not be published until the twentieth century.
But Marx continues to work and write. In 1857,
he declared his ambition in the prologue to the Critique of Political
Economy by presenting a general plan in six "rubrics". Ten years
later, he will only have had time to write a part of the first rubric: it is Volume
I of Capital.
Introducción
Con
motivo de los 150 años de la publicación del primer volumen de El
Capital (1867), considerar la turbulenta historia de su origen es
necesario para conocer y entender las complejidades de la formación de una de
las obras más influyentes de la economía política del siglo pasado. Porque hay
obras cuya posteridad narra mal la gestación larga y difícil que tuvieron. Y
hay pocas como ésta que hayan tenido una génesis tan larga.
"En
todas las ciencias, el comienzo es difícil". Esta cita de El
Capital que sirve de prefacio se aplica perfectamente a la historia íntegra
de la obra. Su gestación padeció de numerosas "contracciones" que
dieron lugar a diversos trabajos intermediarios, algunos de ellos publicados.
Sin embargo, la publicación de la obra tardó 22 años y fue muy esperada tanto
por su autor como por sus editores.
En
consecuencia, el objeto de este artículo consiste en explicar tanto la génesis
histórica de El Capital como las razones de su tan larga e
intermitente redacción. En primer lugar, repasaremos las etapas que marcaron
dos décadas de escritura. A continuación, destacaremos esta odisea de
El Capital, poniendo de relieve los elementos que retrasaron su
publicación.
I-Una larga historia (1845-1867)
Recordar
que el trabajo científico de Karl Marx (1818-1883) fue, como lo escribió
Gilbert Badia, "poco conocido y poco difundido" en vida, es a la
vez una necesidad y una evidencia. De hecho, antes de la edición de El
Capital, Karl Marx no es realmente conocido más que por algunos artículos, folletos
y por una aventura asociativa, la de la Asociación Internacional del Trabajo (AIT)
fundada en 1864.
En
cuanto a sus escritos, su audiencia creció muy lentamente. Porque si Marx
empezó escribiendo muy joven, durante mucho tiempo publicó poco y fue
escasamente leído. Entre su tesis doctoral (1841) y El Capital (1867),
los escritos más leídos del "moro" son artículos de
prensa: escribe para la Rheinische Zeitung o Anekdota
(1842-1843); funda los Annales franco-allemandes (1843-1844) que
desaparecen rápidamente; participa también en el Vorwärts (1844), en la Deutsche
Brüssseler-Zeitung (1847), en el Neue Rheinische Zeitung (1848-1850)
y contribuye en periódicos anglosajones a lo largo de la década de 1850. No
obstante, aparte de los periódicos anglosajones, la mayoría de estos periódicos
tienen una audiencia muy pequeña y una duración de vida muy limitada.
Ante
los ojos de sus lectores, por lo tanto, Marx es en primer lugar periodista, aunque
tenga una formación de filosofía. Su energía y su pasión por las cuestiones
socioeconómicas lo llevan a multiplicar las aventuras editoriales. Pero su
estilo y su propensión a enfrentarse a la Doxa (opinión) contemporánea también
hacen de él un panfletista. De todos los panfletos que escribe, es realmente el
Manifiesto Comunista el que le da, no en 1848, cuando se publica, sino
poco a poco, el aura de pensador político durante las siguientes décadas.
Por
otra parte, La ideología alemana (1845) donde se encuentran los
comienzos del materialismo histórico se publicará póstumamente. La Sagrada
Familia (1846) se publicará, pero resultará ser un nuevo fracaso comercial. Algo después, Las
luchas de clases en Francia (1850) y El 18 Brumario de Louis Bonaparte
(1852) serán más leídos, pero reciben poco eco. Marx no vive de estos libros
que no se venden. Más de una vez cree "haber engullido la quintaesencia
de la penuria, pero no".
Los
primeros contratos editoriales: primeros retrasos y cancelaciones (1845-1849)
Históricamente,
el 1 de febrero de 1845 en París, Karl Marx firma con Carl Wilhelm Leske
(1821-1896), librero y editor en Darmstadt (Alemania), un contrato de edición
de un libro titulado Crítica de la política y la economía política.
Este es un libro que debe incluir dos volúmenes en octavo, con una tirada de 2000
ejemplares y por el cual Marx recibe, en materia de derechos de autor, 3 000
francos franceses. No parece que el "autor" tenga una idea muy
clara de lo que podría ser el libro, ni de su "carácter más o menos
revolucionario" en el momento de
la firma.
En
el contrato no figuraba fecha límite ninguna para la entrega del manuscrito. Lo
que fue un error de juventud por parte del editor (él y Marx tenían,
respectivamente, 24 y 27 años en 1845), ya que el autor se dedicó rápidamente a
otros proyectos. En efecto, Karl Marx decide escribir La ideología alemana,
pues le parece "muy importante publicar primero una polémica contra la
filosofía alemana y contra el socialismo alemán (...) antes de abordar la
evolución positiva". No obstante, no
fue hasta 1846 cuando reanudó la correspondencia con Leske para presentarle
nuevas ideas, y para evocar la posibilidad de que un nuevo editor reembolse a
Leske el adelanto, al mismo tiempo que Marx reiteraba su deseo de permanecer en
su casa editorial…
A
la sazón, el joven filósofo menciona su "mala salud" para justificar su
retraso. Por otra parte, insiste en la obligación que es la suya de tener en
cuenta todos los libros publicados recientemente en Inglaterra y Francia, que pueden
ayudarle a enriquecer esta creciente nueva crítica cuyo "primer
volumen, revisado y corregido, estará terminado a fines de Noviembre". Sin embargo, el
fracaso de la no-publicación de La Ideología empuja a Marx hacia otro panfleto:
será La miseria de la filosofía (1847), en respuesta a Proudhon.
Escaldado por estos retrasos repetidos, Leske rescinde el contrato en dos
ocasiones (1846 y 1847). Marx siente tener durante algún tiempo una deuda moral
con el editor sin ser capaz de "saldar la vieja cuenta" con él. A pesar de
ello, desde el final de 1849 no hay ningún rastro de comunicación, ni siquiera
alusiones a Leske en los volúmenes de la Correspondencia de Marx. El
filósofo pedirá a otros editores (Duncker, Brockhaus, etc.) su ayuda para la
publicación de la Crítica.
Primera
introducción y anuncio del plan general (1857-1859)
Después
de una pausa, Marx retoma su trabajo de escritura y, especialmente, la
acumulación de materiales, notas y borradores. Y una vez en ello, necesita diez
años para redactar una introducción general a la Crítica de la economía
política (1857) de treinta páginas. Marx no la publica
todavía porque piensa que anticipa "resultados todavía no establecidos". Algunos meses más
tarde, una crisis financiera internacional estalla, lo que le hace desear
volver a la economía política. Escribe entonces varios folletos desconocidos
por Engels él mismo y solamente descubiertos después de la Primera Guerra
Mundial. Se trata de los Principios
de una crítica de la economía política (1857-1858) o Grundrisse...
en alemán. El primero de estos textos fue publicado por Kautsky en 1903,
mientras que el segundo fue impreso en Moscú en 1939-1941.
Es
únicamente en 1859 cuando Marx precisa su ambición. En el prólogo a la Crítica
de la Economía Política, el filósofo
indica su proyecto general de dividir en seis rúbricas (primero ‘Cuadernos’,
después “Libros”) la presentación del "sistema de la economía burguesa",
a saber:
• el capital ;
• la propiedad de
la tierra;
• el trabajo
asalariado;
• el Estado;
• el comercio
exterior;
• el mercado
mundial.
Y
especifica que los primeros tres puntos conciernen a las "tres clases
principales que componen la sociedad burguesa moderna". Sin embargo, en
esta Critica, solo aborda el "capital en general" a
través de un desarrollo de más de 150 páginas. Este libro, al igual que sus
publicaciones anteriores, recibe muy poca atención por parte de la comunidad
científica. Pero Marx no
abandona su trabajo y continúa sus investigaciones.
La edición final (1862-1867)
A finales de 1862 Marx cambia su plan y su
"modo de exposición". Confiesa que en su primer fascículo (1859),
el tema fue tratado de manera abstracta. Así pues, el segundo fascículo
debería ser más concreto y "más fácilmente comprendido." El
autor afirma que "el libro incluye sólo lo que debía ser el tercer
capítulo de la primera parte: 'El Capital en general''. Marx respecta,
por lo tanto, su plan original presentado en el prólogo de 1859. En ese
momento, él cree que todo su trabajo está ya acabado. En realidad, aún le
quedan cuatro años antes de finalizarlo.
Debido
a la cantidad de información procesada en su trabajo, a fines de 1866, debe separar
y dividir la que será su obra. Ahora, y este plan no se moverá hasta después de
la desaparición del autor, habrá 4 libros:
• Libro I: El
proceso de producción del capital;
• Libro II: El
proceso de circulación del capital;
• Libro III: Las
formas del proceso global;
• Libro IV:
Contribución a la historia de la teoría.
Marx
afirma que el primer volumen incluye los dos primeros libros. Entonces cada uno
de los siguientes libros estará en un volumen diferente: el volumen 2 para el
libro III; el volumen 3 para el Libro IV. No obstante, se
decide a publicar únicamente el Libro I en 1867 y prefiere seguir trabajando en
el Libro II. Su trabajo para el segundo Libro no lo satisface por ahora.
Tres
años después, en 1869, Marx dice que espera completar "el segundo
volumen [Libro II] antes del verano". Sin embargo,
hasta su muerte en 1883, catorce años más tarde, no dejará de acumular
información y apuntes. Nunca terminará su obra y dejará que sea Engels
(1820-1895) quien lo haga. Mientras tanto, la Comuna de París en Francia – los
"parisinos lanzando un asalto al cielo" fuerzan su
admiración – y también el AIT le habrán dado muchas ocupaciones intelectuales y
profesionales.
II-Las razones de una tan lenta
génesis
Si
el proyecto científico de la Crítica... , que devendrá El Capital,
apareció temprano en la mente de Marx, se impondría poco a poco como una
evidencia a medida que el filósofo alemán dedicaba toda su energía y ambición
intelectual a entender los fenómenos económicos y sociales de su tiempo. Pero
entonces, ¿cuáles fueron las razones de una génesis tan lenta?
La
mala salud
En
primer lugar, debemos invocar la razón misma dada por el autor en el prefacio
de El Capital: "una enfermedad de varios años". Está sirve de incipit
a su trabajo, como si Marx quisiera disculparse. Es cierto que su mala salud
preocupaba a todos sus parientes.
El
"moro" tiene una salud frágil, según se tiene constancia desde 1845. Lo
que es debido a un trabajo agotador que le impulsa a leer y escribir "doce
horas al día". Esto también se
debe a las condiciones muy difíciles que lo llevan a descuidar su salud y
también su higiene. Por lo tanto, los episodios de sus enfermedades crónicas se
multiplican hasta el principio de la década de 1870. El ántrax sucede, entre
otras enfermedades, a la forunculosis. Marx se convierte en un experto en el
arte de distinguirlas. Para curar sus "viejas rosas de sangre" hace regulares
curas de arsénico, y toma "pastillas de opio" para otras
dolencias.
Las
controversias y otras preocupaciones de la vida pública y privada
A
continuación, hay que mencionar las diversas expulsiones o extradiciones que
sufrieron Marx y su familia entre 1843 y 1849. Tras una breve aventura
editorial en Prusia, es expulsado y viene con su esposa Jenny von Westphalen
(1814-1881) a vivir en París, a fines de 1843. A principios de 1845, es
expulsado de Francia por deseo del embajador de Prusia. La pareja se traslada a
Bruselas, donde nacerán sus dos primeros hijos. Estos acompañarán a su padre en
1848, cuando es invitado por el Gobierno Provisional de la República Francesa a mudarse de nuevo
a la capital de la Segunda República. Pero Marx no se queda en Francia y
prefiere participar en la revolución que ve venir en Alemania. Por desgracia,
es un fracaso y un año más tarde, en 1849, es expulsado de nuevo de Prusia. Se
instalará definitivamente en Londres, después de una temporada en el Morbihan
(Francia). Allí nacerán sus últimos niños, en particular sus
hijas, que asistirán a su padre en su trabajo.
A
esto se suman las muchas controversias a las que se dedica Karl Marx a través
de numerosos panfletos u opúsculos (Die Grossen Männer des Exils en
1852, Herr Vogt por ejemplo, en 1860). Sin hablar de su trabajo para la
Liga comunista y la Asociación obrera alemana en la década de 1850.
Estas cuestiones lo acapararán todavía más a través de la AIT para la que
escribirá tres discursos inaugurales en los años 1860.
El
trabajo independiente
Instalado
en Londres, Marx empieza a buscar actividades que le permiten vivir sin trabajar
de manera manual, como él dice irónicamente. Porque sus
artículos de prensa no se venden en Europa, propone a algunos periódicos
estadounidenses ser su corresponsal sobre asuntos europeos. De este modo se
convierte en el "colaborador permanente" del New York
Daily Tribune. Concretamente, los artículos y las entrevistas escritas para
este diario representan su “principal fuente de ingresos" entre agosto de
1851 y marzo de 1862, o sea durante 11 años. Por desgracia, la guerra civil
americana interrumpirá esta colaboración y la renta que sacaba de ella. Marx no
conseguirá volver a ser colaborador de este periódico, ni siquiera una vez la
terminada guerra.
Para
sostener a su familia, el filósofo alemán se vuelve hacia otras actividades
lucrativas, incluyendo un trabajo "en la oficina de Ferrocarriles" Pero su mala letra
es inaceptable a los ojos de sus potenciales empleadores: no conseguirá
mantener su trabajo. La miseria nunca está lejos y, a menudo "la
situación económica alcanza un punto crítico".
El
final feliz
De
hecho, las pocas veces que el enemigo de la burguesía y de los rentistas mejora
de forma duradera la vida de su familia, lo hace gracias a las sucesivas
herencias. En primer lugar su esposa Jenny, de ascendencia aristocrática, hereda
en 1856 de su madre. Más tarde, el
legado de la difunta madre de "Chaley" (otro apodo de Marx) le
permitirá mejorar su situación financiera personal y familiar en 1864.
Durante
todos estos años, su fiel amigo Engels constituye un apoyo total. Marx lo reconoce
regularmente: "sin él, hace mucho tiempo que habría tenido que ponerme
a 'trabajar' ". La
correspondencia rebosa de menciones a los préstamos y devoluciones entre las dos
familias (Jenny, y a menudo sus hijas, se hacen cargo), impidiendo todo ello a
Marx dedicarse a su obra.
De
cualquier modo, Marx excluye "realizar un trabajo lucrativo antes de
que [su] libro esté terminado". Para ayudarle,
Engels, "a través de un settlement [acuerdo]", le
permite mejorar definitivamente su situación económica En concreto, con el dinero de la venta de
acciones de su fábrica textil en Manchester, Engels puede dar una renta anual a
su amigo Karl Marx. Esto le permite "trabajar serenamente" en su obra. En
resumen, Marx se convierte en rentista a partir de 1869.
Más
allá de la ironía de la historia, Marx aún no podrá dedicar más tiempo a
escribir el Libro II de El Capital. Tras la publicación en varios
idiomas de su obra magna, Marx, que es multilingüe, dice que sufre de una mala
traducción del Libro I, sobre todo en francés. Por lo tanto,
debe retocar el texto ampliamente. Según lo escrito por Jenny, este "trabajo,
además de la corrección de las pruebas procedentes de Alemania y de su trabajo
abrumador para la Internacional, es excesivo". De hecho, la
escritura del Libro II no progresa hasta la muerte de su autor en 1883.
Conclusión
Al
final, a pesar de su ambición y energía, Marx no puede hacer nada mejor que
publicar una parte del primer estudio de su proyecto inicial. Abandona los
otros libros, aunque quedarán cuadernos y borradores en cantidades. Por lo
tanto, después de la muerte de su autor, estos "materiales"
serán "terminados" y editados por primera vez por Engels
(Libro II y III) en 1885 y 1894, y luego por Kautsky (Libro IV) entre 1905 y
1910.
En
vista del plan general, la publicación efectiva es muy parcial. De las seis
rúbricas proyectadas en el prólogo de 1859 ("el capital, la propiedad
de la tierra, el trabajo asalariado, el estado, el comercio exterior, el
mercado mundial"), sólo un cuarto del Capital será publicado
por su autor, dejando a las otras cinco un destino de proyecto sin fin. Como la
roca de Sísifo, la Economía de Marx simboliza la historia de una larga
obsesión, una tarea incesante. A pesar de casi cuarenta años de esfuerzos
discontinuos (1845-1883), dicha tarea no se verá cumplida. La génesis de El
Capital corresponde bien a la imagen de la obra del gran filósofo
alemán: congelada, inacabada, pero siendo siempre un proyecto científico
todavía abierto y fructífero.
REFERENCIAS:
Marx
Karl, (1965-1994), Œuvres, 4 volúmenes, Bibliothèque de La Pléiade, Edición
establecida por Maximilien Rubel, Paris : Gallimard.
Marx-Engels,
(1971-1989), Correspondance, Edición establecida por Gilbert Badia y
Jean Mortier, 12 volumenes, Paris : Editions Sociales.
Marx-Engels, (1971), Lettres à Kugelmann,
Edición establecida por Gilbert Badia, Paris : Editions Sociales.
ANEXO 1: Tabla de
abreviaturas utilizadas en Notas de pie de página
Titulo
|
Abreviación
|
Lettre
à Kugelmann
|
Kug.
|
Correspondance,
tome X
|
Corr. X
|
Œuvres (Pléiade):
Economie I
|
Pl. I
|
Œuvres (Pléiade):
Economie II
|
Pl. II
|
Œuvres (Pléiade):
Philosophie
|
Pl. III
|
Œuvres (Pléiade):
Politique I
|
Pl. IV
|