Revista de Ciencia Poltica
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Revista Nº15 "TEORÍA POLÍTICA E HISTORIA "

Resumen

El tema del populismo y el ascenso de los neos en la teoría política hacen pertinente el estudio de este tema, para resaltar en mayor medida los errores en los que se puede caer al caracterizar lideres dentro de esta categoría. Es por esto que resulta tan importante y pertinente para avanzar en el tema la teoría de  María Moira Mackinnon y Mario Alberto Petrone que hace referencia al complejo de cenicienta. En esta medida el presente trabajo se presentara como un ensayo académico que usa el método comparativo para resaltar lo dicho en la hipótesis. Los casos a analizar serán Álvaro Uribe en Colombia y Hugo Chávez en Venezuela.

Abstract

Populism as an issue and the rise of “neo” prefix in political theory make necessary a serious study in order to stress that some leaders are included under those categories by mistake. For this reason it would be important to appeal to María Moira Mackinnon and Mario Alberto Perrone’s theory which refers to Cinderella’s complex. In this way, this paper will use comparative method to analyze the presidencies of Álvaro Uribe in Colombia and Hugo Chavez in Venezuela and prove what is said in the hypothesis.

 

La flexibilización del término populismo  y neopopulismo en la categorización de los actores políticos en América Latina

                                      Por: Juan Camilo Rivera López*

 

Introducción

 

El tema del neopopulismo y su injerencia en el actuar de un político es un tema siempre evidente dentro de los diferentes debates alrededor de los dirigentes de los países. Es por esto, que el presente artículo se presenta como una alternativa a analizar el tema desde un punto de vista crítico. En donde, se tiene muy en cuenta el análisis teórico, adicionándole, el análisis comparado de dos casos muy relevantes dentro del estudio de este tema, los líderes Álvaro Uribe en Colombia y Hugo Chávez en Venezuela-

En esta medida, el tema del neopopulismo hace pertinente el estudio del mismo desde un punto crítico-teórico en donde se analice de forma crítica el uso inapropiado del término o la implicación del mismo, para incluir diferentes casos. Por consiguiente, la selección de los casos se hace en primera instancia, y como se dijo anteriormente, por ser de los casos más nombrados en los diferentes debates. Adicionalmente es menester analizar los mencionados líderes políticos, debido a que son dos dirigentes muy diferentes e incluso para muchos contrarios en su actuar político. Lo cual lo hace necesario para poder entender este tema y desglosar la complejidad del mismo.

El objetivo del presente trabajo es analizar los casos Uribe y Chávez desde la perspectiva neopopulista para evidenciar diferencias, semejanzas e incluso errores en la categorización de estos casos.

El debate frente al término neopopulismo como forma recurrente en que los gobiernos de la región han empezado a manifestarse es evidente. Teóricos como Kenneth Roberts afirman que el populismo se ha presentado en diferentes lugares del mundo pero se ha expresado de forma clara en Latinoamérica, con casos particulares como Hugo Chávez en Venezuela y Álvaro Uribe en Colombia. Los cuales, abren el debate frente al populismo en la nueva época.

En los casos mencionados de neopopulismos se resalta el patrón personalista de regímenes políticos, como característica tajante para categorizar (Vilas 2003: 13). No obstante, el reduccionismo es un error comúnmente concurrido, en la medida que, como lo resalta Aldo Olano, se cae en dos reduccionismos, el mediático, referente a por ejemplo que la exposición del líder a los medios de comunicación lo hace populista. Y el reduccionismo fiscalista, que se refiere al proteccionismo característico de algunos sectores, en donde se dice que cualquier propuesta alternativa a la teoría neoliberal es populista (Olano 2006-2007).

Desde las reformas neoliberales y macroeconómicas de 1990 se empezó a usar el término neopopulismo para referirse a los personalismos de estas características.  Sin embargo existe una discusión referente al análisis del término populismo. En donde posiciones como las de Laclau quien afirma que “es posible calificar de populistas a la vez a Hitler, a Mao o a Perón” (Vilas 2003: 20), a lo cual Vilas critica haciendo referencia a que el cae en un reduccionismo discursivo de lo que se llama populismo. Además de esto se le suma la mala caracterización de los regímenes considerados neo populistas.

Es por esto, que la posición de Mackinnon y Patrone se hace evidente en donde se puede hacer referencia a que el término de populismo y neopopulismo son flexibilizados para hacer que calce dentro de cualquier pie [1] . Por consiguiente, es importante analizar a profundidad el tema presentado para evitar caer en el reduccionismo. En un principio comenzaremos con la siguiente hipótesis de trabajo:

“La teoría populista y neopopulista se puede ver algo limitada al quedarse en aspectos discursivos y no trascender a otras características. En esta medida, en muchas discusiones se caería  concurrentemente en el error de usar el término de forma indiscriminada para referirse a dirigentes que incluso luego se afirmarían como contrarios en términos generales”.

Marco Teórico:

Como punto de partida para analizar el término como tal y sus componentes teóricos se toma la obra de Mackinnon y Petrone, teniendo en cuenta posiciones críticas como las de Carlos Vilas y Aldo Olano. En adición, se tendrá en cuenta la conferencia de Michael L. Connif para bordar la parte histórica del surgimiento del neopopulismo en América latina. Adicionalmente para encaminar el articulo hacia el objetivo de evitar la flexibilización de los términos se usara la literatura de Sartori, en especial el termino stretching, que hace referencia a una parte importante de la hipótesis anteriormente esbozada.

Para el caso de Álvaro Uribe se empezara por un análisis teniendo como base el análisis de la gestión del mandatario. Esto se hará por un lado analizando sus políticas, adicionalmente por medio de un análisis mediático se podrá analizar sus características en público. Se usaran autores como Aldo Olano nuevamente, quien analiza el caso de Uribe y Chávez. De igual forma se usara el trabajo de Carolina Galindo Hernández sobre el neopopulismo en Colombia.

Dentro de este análisis se incorporaran dos autores más que son Luis Guillermo Patiño Aristizábal y Porfirio Cardona Restrepo, quienes analizan el discurso de Uribe desde una perspectiva neopopulista, adicionalmente analizan el discurso de Chávez desde la misma posición. Al igual que Claudia Ximena Carrillo Vargas que analiza a Uribe desde una perspectiva neo populista.

Adicionalmente para el caso particular de Chávez, además de los artículos en donde es nombrado anteriormente se analizara desde el trabajo de, Nelly Arena. Quien analiza el proyecto chavista como tal y la discusión entre el viejo y nuevo populismo. Adicionalmente el trabajo de Fernando Casal quien, analiza el discurso y la política internacional de Hugo Chávez.

Por último, se realizara una yuxtaposición de los casos estudiados para analizar las teorías anteriores y los aportes de los mismos para demostrar la hipótesis.

1. Análisis del neopopulismo desde el caso Álvaro Uribe Vélez, en Colombia durante sus dos periodos presidenciales.

Con las reformas neoliberales y macroeconómicas  características de los 90 se empezó a usar el término neopopulismo para referirse a los personalismos de estas características. No obstante, dentro del ambiente académico y teórico existe una discusión referente al análisis del término populismo y neopopulismo. En dicha discusión, se pueden resaltar posiciones anteriormente mencionadas como la de Laclau quien de forma crítica afirma que “es posible calificar de populistas a la vez a Hitler, a Mao o a Perón” (Vilas, 2003:20), de igual forma, se encuentra la posición de Vilas quien critica el termino y el uso de este en diferentes trabajos haciendo referencia a que el cae en un reduccionismo discursivo. Adicionalmente a esto se le suma la mala caracterización de los regímenes considerados neo populistas, pues la discusión se extiende como se extiende el término para su aplicación a regímenes con nuevas características.

 

Dentro de esta lógica es válido aterrizar el tema en primera medida con el caso de la administración de Álvaro Uribe Vélez, quien es llamado de forma abierta por muchos sectores como neo populista, neo liberal y demás neos para atacarlo, pero dentro de este análisis académico es importante preguntarse ¿Qué tan neo populista es este dirigente en verdad?. En primera instancia, se afirma en algunos trabajos y registros de prensa que un aspecto característico de este ex dirigente era el hecho de no pertenecer un partido tradicional, sin embargo esto fue porque no paso dentro de las votaciones internas y por esto decidió presentarse independientemente. Es decir que, en un inicio Álvaro Uribe, se presenta como un perteneciente del partido liberal, partido tradicional colombiano al cual pertenecía desde 1977.

Sin embargo, dentro de las elecciones internas gana Horacio Serpa para representar al partido como único candidato de liberalismo colombiano. Por esto, Uribe decide presentarse como “independiente” [2] y de esta forma crear un partido personalista y un posterior gobierno igual. En esta medida, el término populista parece evidente en su independencia. No obstante, en el momento de su posesión, se apoya en el partido conservador colombiano, además de sectores del partido liberal. Por consiguiente, el tema de la independencia la presenta él como algo fuerte dentro de su gobierno, sin embargo, en los cargos públicos se pueden identificar los partidos y los sectores aliados. En esta medida, su independencia queda muy cuestionada, pues a pesar de quedar electo como candidato independiente su triunfo y su mandato reposa en los partidos y sectores tradicionales con los que anteriormente mantenía simpatía o contacto.

De igual forma, el factor nacionalista evidente en las características de un régimen populista es evidente pero no para rechazar la presencia extranjera en primera medida como ocurre tradicionalmente en los denominado populistas. En este gobierno se realiza todo lo contrario, se hace hasta lo imposible por atraerla, en este gobierno se impulsan un gran número de incentivos para atraer la inversión extranjera. El punto nacionalista se puede ver evidenciado en otras políticas internas, tales como el manejo del conflicto interno contra las FARC. Adicionalmente, se presentaban enemigos externos en particular Venezuela quien como Estado apoyaba las operaciones de las FARC.

El factor de apoyo popular muy importante para quienes caracterizan líderes dentro de este tipo, es evidenciado en este gobierno en donde tiene niveles de popularidad muy altos y constantes. Esto se puede ver en las encuestas con intento de voto y de apoyo al gobierno, inclusive, en la reelección alcanza un 62,35% [3] ganando de forma inmediata la presidencia para el periodo de 2006-2010, esta cifra record lo llevo a posicionarse como el presidente con mayor número de votos. Esto lo explican teóricos colombianos, sosteniendo que dicha popularidad se debe a que por medio de una dinámica de guerra ataca de forma directa el conflicto armado, lo cual, es aceptado positivamente por la mayoría de la población colombiana.

Sin embargo, es importante resaltar que en la teoría, el nacionalismo dentro del discurso es presente de forma constante el uso de referentes culturales e identificando fácilmente enemigos y males exteriores dentro o fuera de la región. De forma que, en términos económicos –que eran de suma importancia por el contexto de crisis de la década de los 30- se atacaba constantemente la dependencia al mercado del norte de la mano de las ideas de progreso y modernidad por lo cual “los líderes populistas e intelectuales reformistas consideraran al “imperialismo norteamericano” como el principal enemigo del pueblo” (Olano, 2006-2007:15)

En esta medida, aspectos puntuales tales como el exceso de consejos comunales y el personalismo con el que se mueve su política puede decirse que si existe cierta semejanza al populismo aunque es un análisis muy vago y compartiendo lo que dice Vilas la teoría neo populista se limita a la hora de caracterizar a quienes dicen ser neo populistas, se quedan en el discurso y no comprenden bien la teoría base, el populismo. Esto lo dice teniendo en cuenta que argumentar que alguien es populista o neo populista porque parece serlo es irresponsable y se debe analizar la base de la teoría y no estirar los términos para lograr encajar un caso en particular.

En esta misma línea argumentativa, es importante resaltar incógnitas en torno a la definición y enumeración de atributos referentes al populismo. Como lo expresan Ionescu y Gellner es pertinente cuestionarse si “¿Existe un sustrato unitario subyacente bajo esas formas [populistas] o bien se designa con un mismo nombre una multitud de tendencias desvinculadas entre si?”, haciendo referencia a la flexibilidad irresponsable del término, convirtiéndose en una “etiqueta política, que designa una amplia gama de fenómenos, partidos, movimientos, líderes democráticos y autoritarios de distintas épocas, lugares y afiliaciones ideológicas” (Ruiz 2006: 103). En este punto es donde la teoría se flexibiliza tanto que la teoría pierde peso en términos académicos y teóricos puede pasar a ser usada de forma imprudente en otros escenarios para estigmatizar o resaltar ciertos líderes.

Otro punto que es importante tratar es su relación con los otros poderes, debido a que a lo largo de sus mandatos tuvo unas relaciones tensas. Este punto es resaltado debido a que se argumenta que el presidente concentraba -o lo intentaba- el poder. En donde muchos argumentaban que si bien sus consejos comunales eran un problema porque suprimía las funciones de los entes regionales, sus presiones a la corte son mal vistas pues concentraba todavía más el poder. Esto lo hacía apoyándose en las encuestas que lo favorecían. Este punto es más fuerte, en la medida que muestra una clara personalización de la política, en donde, en el poder legislativo se da un florecimiento de partidos en torno al presidente [4] El poder judicial y el ejecutivo tenían relaciones constantemente más tensas, debido a que, temas como la reelección, investigaciones por compra de votos y vínculos con grupos paramilitares siempre se hicieron latentes. Adicionalmente las interceptaciones telefónicas hechas a la corte suprema de justicia, partidos de la oposición y dirigentes de diferentes ONG, sindicatos y grupos de presión sellaron el cierre de su mandato con las relaciones más deterioradas que ha tenido un dirigente. Por consiguiente, en este punto se puede ver como este punto de la personalización de la política empieza a cruzar la línea de la legalidad, poniendo en discusión esta característica populista.

En esta medida, se debe resaltar que la característica de líder carismático no puede ser el único camino para una aproximación excluyente o discriminante al populismo, pues esta característica está presente en otros estilos políticos y no políticos. Por esto, se debe evitar caer en reduccionismos para no hacer usos indebidos de este término para caracterizar a un líder. Debido a que la personalización de la política es un camino diferente al populismo y neo populismo, esta se puede explicar por la crisis de los partidos y se vuelve cada vez más común en los partidos modernos, pues en muchos se rescatan virtudes de representantes para atraer mayor cantidad de votos y adeptos. Adicionalmente el hecho de ser un outsider o no, no lo caracteriza como populista de forma automática.

Un punto que debe ser resaltado con mayor fuerza si se quiere rescatar el tema de la popularidad de Uribe, es el hecho de que el siempre busca responderle a su electorado, mostrando encuestas y cifras de apoyo para sustentar sus políticas. Sin embargo, este punto es muy débil en la medida que en el mandato de Uribe solo se promulgó un referendo y no obtuvo los resultados esperados. Adicionalmente la abstención en las votaciones a presidente en su segunda elección y en las elecciones al congreso son cifras record. Por consiguiente, el tema del populismo en Uribe se ve un poco difuso, por esto se analizara otro caso y se sobrepondrán las similitudes y diferencias para analizar estos mandatarios y la flexibilidad del término.

 

1.   Análisis del neopopulismo desde el Caso Hugo Chávez, en Venezuela durante sus mandatos.

El caso de Hugo Chávez es un caso particular, debido a que, en cierta medida existe un consenso sobre su categorización en el rubro del populismo. Chávez representa –o lo intenta- un líder latinoamericano de los países que están en contra del “imperio extranjero” particularmente norteamericano, este lenguaje es muy típico del líder populista, en la medida que recuerda aquellos líderes populistas clásicos en donde se movilizaban a las grandes masas  contra el enemigo externo. Esto sigue estando presente en la actualidad y se puede afirmar que es la base de la transmisión ideológica y las movilizaciones.

El origen de Chávez es humilde con carrera militar y su acceso al poder fue por vía electoral, eso lo hace símil a clásicos como Perón. (Gratius 2006) Adicionalmente su constante ataque hacia la oligarquía venezolana es otro factor que se puede recordar de las bases teóricas del populismo. “Las características más resaltantes del populismo venezolano son la movilización y el control de las masas por Hugo Chávez, el apoyo en un movimiento (el bolivariano), el rechazo de los tradicionales partidos políticos, un presidencialismo fuerte y autoritario, una mayor intervención del Estado y un discurso político nacionalista” (Gratius 2006: 5)

El punto difícil del análisis del mandatario venezolano es el hecho de ser acusado de autoritario, incluso Petkof adversario político afirma que Chaves se encuentra con un pie en el autoritarismo y uno en la democracia. Actualmente las potencias capitalistas ven su modelo como un modelo peligroso para el orden internacional. Adicionalmente sus amistades con mandatarios de países no muy apreciados por el mundo occidental, como Irán, Rusia y China, dificultan sus relaciones y su imagen con estos países. Sin embargo sus reformas en ánimo de concentrar el poder están encaminadas no a cerrar instituciones del Estado, sino a colocar personas afines a sus objetivos y fines políticos. Esto lo hace debido a que al igual que el mandatario anterior, tiene un nivel de apoyo electoral muy significativo, “No cabe ninguna duda de que el origen del Gobierno venezolano es democrático: a diferencia de muchos otros presidentes latinoamericanos, Hugo Chávez fue democráticamente elegido en 1998, reelegido en 2000, reconfirmado por el referéndum de agosto de 2004 y nuevamente elegido en los comicios de diciembre de 2006” (Gratius 2006: 5) Esto muestra que su origen es su democrático, mas no que su actuar es igual.

Teniendo como base su apoyo popular el mandatario utilizó su poder para promover diferentes clases de reformas, por ejemplo, el aumento del periodo presidencial, incluyo en consultas populares las revocatorias de los mandatos, otorgando al pueblo una mayor cantidad de poder. Adicionalmente la nacionalización de los productos energéticos es un punto manejado por el mandatario por medio del nacionalismo, pues muestra la mano extranjera como una amenaza al manejo independiente de los recursos del país.

El acercamiento al pueblo lo hace Chávez constantemente, se puede ver en su conocido programa Aló presidente, en donde el mandatario trata de forma personal los problemas, triunfos e incógnitas que se presentan en la política diaria del país. La forma de dirigirse al país nunca es formal en términos semánticos, sino por el contrario a lo largo de su acercamiento se maneja una relación informal que pretende brindar al publico una sensación de mayor confianza y pertenencia. Dentro de sus mayores opositores se puede encontrar el argumento que hace referencia a que el mandatario tiene una comunicación muy buena que es convincente y clara. Esto fue expresado por la Universidad de la Plata quien en semanas pasadas otorgo al mandatario el premio Rodolfo Walsh otorgado por la Red Carreras Argentinas de Periodismo y comunicación. Dicho galardón es dado al presidente Chávez por su trabajo y esfuerzo en la comunicación popular. Tema que no fue bien acogido por algunos sectores opositores al régimen chavista, sobre todo por canales y medios de difusión cerrados en momentos pasados.

Otro punto característico que relaciona a Chávez con el populismo clásico es el tema del enemigo, pues como se dijo anteriormente, el enemigo que empieza por destruir es la oligarquía existente en el país, sin embargo, “pero en la medida en que sus adversarios fueron perdiendo poder y dejaron de constituir una amenaza para su régimen, la frontera fue corriéndose hacia una exterioridad enemiga, más allá de los límites nacionales, como la que encarnan EEUU y su gobierno” (Arenas, 20014: 40) Lo cual hace referencia evidente al tema del populismo clásico.

Sin embargo, un punto en donde se afirma que este caso puede ser analizado desde el punto neopopulista es el carácter de outsider que emana de su mandato. En la medida que, se afirma que sin hacer ninguna carrera política ni haber ejercido ningún cargo político se posición como presidente. Presentándose en esta línea como diferente a la política tradicional. La intención que se puede resaltar en este aspecto es que se quiere usar el termino neopopulista para dar continuidad al termino e incluir nuevas características particulares que antes no se presentaban en los regímenes dentro de este grupo categórico. No obstante, el estiramiento de los conceptos es un tema delicado en la medida que se puede contradecir. Es decir, se puede por ejemplo incluir presidentes o ejemplos que antes no se incluían o que se consideraban fuera de este rubro.

 

De igual forma, el mandatario venezolano es catalogado en el viejo o clásico populismo por sus características evidentes anti oligárquicas y anti  influencia extranjera en especial EEUU. Adicionalmente moviliza gran parte del pueblo en la medida de mostrarse pro a favorecer las capas más desfavorecidas de la sociedad. Estas movilizaciones de masas las hace con una estrategia nacionalista en donde reviven sentimientos de patria y unidad encaminados a sus reformas. En esta medida, el personalismo es evidente y esto se ve expresado en la medida en que se presenta como un outsider fuera de ese círculo tradicionalista de los partidos y las elites políticas y económicas del país.

Este último punto es importante en la medida que se usa para incluir al mandatario en la extensión neo del término populista. Esto en la medida que, se basa en ejemplos de mandatarios latinoamericanos de la década de los 90. Sin embargo, Hugo Chávez es catalogado dentro del populismo clásico en la medida que sus características se tornan más propensas a ser incluidas dentro de esta inclinación. No obstante, autores como Nelly Arenas rescatan características particulares que no se encuentran en los casos del populismo clásico, “el de Chávez es un populismo militarista cuyas relaciones con la democracia son, en consecuencia, tanto o más ambiguas que las que en el pasado tuvieron los gobiernos de esta naturaleza en la región” (Arenas 2004), a pesar de esto esta autora afirma que Chávez es un populista clásico con particularidades, como la resaltada.

Adicionalmente, es importante resaltar el carácter autoritario que muchos sectores afirman, en la medida que es pertinente para enriquecer este análisis. Actualmente el presidente venezolano es catalogado por sus opositores internos y externos como autoritario, debido a que, presenta reformas políticas y económicas que incluyen recortes, restricciones y cierres. Autores como Susanne Gratius resaltan en términos positivos la ampliación de mecanismos para la participación popular y la organización, adicionalmente el gran numero de programas en favorecimiento a los sectores más desprotegidos del país. Sin embargo resalta en término negativos, la militarización de la política y la concentración cada vez mayor del poder en el ejecutivo. De igual forma, se afirma que el hecho de que se personalice la política en exceso amenaza la institucionalidad y la democracia, pues disfraza el autoritarismo de populismo es decir, “la democracia también se menoscaba cuando los líderes populistas se ofrecen como los únicos capaces de resolver los problemas en el mismo instante en que los padece la sociedad, para lo cual reclaman su relación directa con los oprimidos, sin mediaciones ni arreglos políticos que involucren plazos. Entonces la creación de institucionalidad democrática sostenible se ve amenazada” (Arenas 2004: 47) A pesar de esta posición es pertinente resaltar nuevamente el hecho de que el gobierno bolivariano de Chávez no ha suprimido instituciones, sin embargo, esa delgada línea entre el populismo chavista y el autoritarismo es el debate que sigue en curso.

  1. Análisis comparado de los casos estudiados anteriormente, conclusiones, semejanzas y diferencias encontradas en el estudio.

Los casos anteriormente estudiados dan un acercamiento a la teoría populista, en la medida que ambos presentan puntos que comúnmente son otorgados al estilo populista, tales como la forma de comunicación directa e informal con el pueblo, los altos niveles de popularidad, la personificación del poder, entre otros. Adicionalmente presentan puntos particulares que hacen evidente el debate entre la categorización clásica o nueva. Por esto, es pertinente hacer una yuxtaposición de los casos en términos de encontrar diferencias similitudes y vacios entre la teoría y el estudio.

Para empezar es importante recordar la teoría de  María Moira Mackinnon y Mario Alberto Petrone que hace referencia al complejo de cenicienta. En dicha ponencia teórica se resalta el problema del reduccionismo en el análisis, en la medida que critica el populismo pues un reduccionismo teórico y adicionalmente una flexibilidad en los términos genera una zapatilla que podría quedarle a muchos mandatarios. En esta medida, se puede considerar que reducirse a características discursivas o carismáticas sería un error.

Ambos mandatarios comparten características de estilo político, por un lado, Uribe mantiene con sus consejos comunales y su acercamiento constante a los medios una relación personalista con su electorado, esto ocurre de forma muy parecida con el mandatario venezolano, quien es un poco más ambicioso y con su programa Aló Presidente mantiene una relación igual con el pueblo. Ambos mandatarios usan términos informales para generar un ambiente de mayor confianza entre ellos y su pueblo. Ambos se dirigen constantemente a diferentes regiones para solucionar los problemas de las regiones del país, ahondando el tema del personalismo en la política.

Adicionalmente, son seguidores de las encuestas y de esta forma legitiman su gobierno y sus políticas. Ambos mandatarios presentan popularidades muy altas y constantes, por lo que aprovechan esto para movilizaciones de masas en torno a sus políticas. En este punto se encuentra un factor diferenciador y es la intención de decidir todo por medios plebiscitarios. Desde el lado venezolano se puede identificar reformas por este medio incluso en 2004 fue reconfirmado en el poder por referéndum, no obstante, el lado colombiano tiene intenciones de elegir por plebiscito diferentes puntos, sin embargo, su intento fracaso en 2003 cuando impulso un referendo y no obtuvo los resultados esperados. En esta medida, el gobierno de Uribe descarta este medio y usa los medios y las alocuciones presidenciales para presionar de forma pública a los otros poderes para alcanzar sus objetivos. De esta forma, se ve como el gobierno del colombiano concentra el poder de otra forma, con llamadas y enfrentamientos con los otros poderes.

Otro punto encontrado que muestra diferencia en ambos mandatarios es el ataque a un enemigo. Como se identificó antes en el trabajo, para Chávez el enemigo empezó por ser la oligarquía venezolana que había hundido al país en una crisis y luego el enemigo pasó a ser Estados Unidos y su influencia en la región. Uribe no presenta un enemigo muy claro, el enemigo en el que se acoge para promover su política es las FARC quienes representan la amenaza más grande contra el funcionamiento de la democracia. Adicionalmente, en un inicio no muestra enemigos extranjeros, por el contrario promueve la inversión extranjera otorgando ventajas significativas a las empresas externas. Este punto es significativo, en la medida que se encuentra ligado con los postulados de la teoría populista.

En esta misma línea se encuentra el tema del nacionalismo, que aunque se presenta en ambos mandatarios, estos lo fortalecen diferentemente. Por un lado, el colombiano usaba el tema de la violencia y la guerra contra el terrorismo como afianzador nacionalista, mientras que el presidente venezolano usa la intervención extranjera y la nacionalización de recursos como promotor del nacionalismo. Además, el favorecimiento a los sectores más desprotegidos de la sociedad se hacen evidentes en su plan de gobierno de forma muy clara por el venezolano, quien luego usara esto para movilizar las masas. Esto no se ve de forma tan clara en el caso colombiano, pero su relación con el pueblo por medio de los consejos comunales y los acercamientos regionales.

Ambos mandatarios presentan particularidades que hacen debatible su entrada en el rubro neopopulista. El mandatario venezolano es un outsider que proviene de las fuerzas militares y de un intento fallido de golpe de Estado, que da en sus políticas gran importancia a los militares y a los sectores más desprotegidos y desfavorecidos de la ciudad. En el otro lado, el mandatario colombiano se presenta como outsider cuando parece no serlo, lo que este intenta es concentrar el poder con personas afines a sus objetivos de gobierno. El tema del acercamiento y la movilización de las masas parece novedoso y es por esto que en ocasiones intenta introducirse al mandatario en esta categoría.

4. Conclusiones y Reflexiones

 

Dentro de la teoría neo populista se puede ver un poco limitada al quedarse en aspectos discursivos y no trascender a otras características. De igual forma es resaltante el análisis de Vilas en donde afirma que no se entiende completamente la teoría base del populismo. Por tanto afirmar que existen neopopulismos se puede si se toman ciertas características sin embargo esta no contempla los casos complejos en donde se afectan más variables.

 

Adicionalmente el estudio comparativo muestra que los casos estudiados en ciertas ocasiones se acercan y parecen símiles y en otras parecen opuestos. Sin embargo, el objetivo del trabajo era mostrar los problemas que hay en la categorización de los mandatarios de forma irresponsable y flexible en este rubro. Adicionalmente, si se le agregan aportes como los de  Laclau y Vilas quienes afirman que el término como tal es muy poco construido adicionalmente la flexibilidad del término hace que si existían discusiones en temas del populismo clásico, cuando se hace mención al debate neo el tema queda todavía con mayores vacios.

Es por esto que es pertinente cuestionarse si el término es usado de forma indiscriminada o no, debido a que esto se ha hecho en diferentes momentos en los cuales se quiere estigmatizar o resaltar algo de un candidato. Actualmente el tema sigue siendo punto de debate entre teóricos y actores de la política, debido a que es usado por la prensa y por candidatos de diferentes partidos para demeritar o alabar diferentes estilos políticos de otros actores.

En esta medida es pertinente concluir que el debate queda abierto, no existe una posición ni un argumento ultimo, según lo estudiado. El tema sobre la flexibilización del término puede hacer que en ocasiones no se caiga en bloqueos conceptuales, pero a la vez puede hacer que esta se convierta en aquella zapatilla de la cenicienta que le puede quedar a quien le parezca al que lo utiliza. Se debe usar de forma más responsable que haga referencia más al estilo como tal del político y no para referirse de forma irresponsable a aspectos discursivos o de acción que no le gustan de cierto político. Debido a que entre más se estire el término en sentido conceptual pierde validez en el ambiente académico y teórico.

*Universidad Externado de Colombia.

 

Bibliografía:

Libros:

 

 

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[1] Analogía realizada por la teoría de estos autores sobre el complejo de la cenicienta.

[2] Se adicionan comillas para resaltar lo cuestionable de su presentación como independiente.  

[3] Datos tomados de la Registraduría General de La Nación, para ver con mayor detalle dirigirse a: http://www.registraduria.gov.co/resprelec2006/0528/index.htm

[4] Personalistas referentes a la figura de Uribe. Partidos como Partido de la U y otros que desaparecieron o se aliaron para elecciones futuras, que guardaban una relación ideológica con el ex mandatario.